Con la reciente reaparición de Donald Trump en el panorama político, las posibles implicaciones de sus políticas energéticas y medioambientales para la industria de la energía solar vuelven a ser motivo de debate. Durante su presidencia anterior, Trump implementó medidas que favorecieron los combustibles fósiles y desincentivaron la transición hacia las energías renovables. Pero, ¿qué significaría para la industria solar un posible regreso de estas políticas? Lo analizamos. 

1. Retrocesos en la regulación medioambiental

Uno de los puntos clave de las políticas de Trump fue la desregulación medioambiental. Durante su mandato:

  • Estados Unidos se retiró del Acuerdo de París, lo que generó incertidumbre sobre los compromisos del país en la reducción de emisiones de carbono.
  • Se impulsaron políticas que favorecieron la producción de carbón y petróleo, afectando la competitividad de las energías renovables.

Un regreso a estas políticas podría frenar el crecimiento del sector solar en Estados Unidos, disminuyendo el apoyo gubernamental a proyectos de energía limpia.

2. Impacto en incentivos fiscales para energías renovables

Las energías renovables, incluidas la eólica y la solar, han dependido históricamente de incentivos fiscales como el Investment Tax Credit (ITC). Durante la administración Trump, estos incentivos no se renovaron con la misma intensidad que en mandatos anteriores, ralentizando el ritmo de adopción solar en el país.

Posibles efectos:

  • Menor financiación para proyectos de energía solar.
  • Reducción en el número de instalaciones solares residenciales y comerciales debido al encarecimiento inicial.

3. El efecto global en la energía solar

Estados Unidos es uno de los mercados más grandes de energía solar, por lo que cualquier cambio en su política energética puede tener repercusiones globales. Si Trump vuelve a priorizar los combustibles fósiles:

  • La demanda global de componentes solares podría disminuir, afectando a fabricantes en China y Europa.
  • Mercados emergentes, como el europeo, podrían asumir un papel más importante liderando la transición energética global.

4. Oportunidades para Europa y España

Si bien las políticas de Trump podrían desacelerar el crecimiento del mercado solar en Estados Unidos, Europa y, en particular, España, tienen una oportunidad de destacarse como líderes en la transición energética. Con objetivos ambiciosos de reducción de emisiones y el auge de soluciones como los kits solares autoinstalables de Tornasol Energy, el continente puede consolidarse como un referente en la energía renovable.

España, con su abundancia de sol y políticas de fomento del autoconsumo, está en una posición privilegiada para acelerar la adopción de tecnologías solares, incluso si otros mercados como el estadounidense retroceden.

5. El papel de Tornasol Energy

En Tornasol Energy, creemos que la transición hacia un futuro sostenible no debe depender exclusivamente de las políticas de grandes potencias. Por ello, seguimos apostando por soluciones accesibles y eficientes, como nuestros kits solares autoinstalables plug & play, para que cualquier hogar pueda producir su propia energía limpia y contribuir a la lucha contra el cambio climático. Por ello estamos liderando la expansión de la energía solar autoinstalable en Europa. Ya estamos disponibles en 11 países de la Unión Europea con vistas a llegar a los 27 en 2025.

Conclusión

Aunque las políticas de Donald Trump podrían suponer un revés para la energía solar en Estados Unidos, el panorama global sigue siendo alentador gracias a los avances en Europa y otros mercados. En Tornasol Energy, continuaremos trabajando para que más hogares y empresas puedan adoptar la energía solar de forma sencilla y asequible, independientemente de los cambios políticos internacionales.

Tornasol Energy, Towards Energy Autonomy